Hay muchas regatas que ya hemos perdido mucho antes
de que hayan empezado. Esto ocurre cuando no nos preparamos como es debido
antes de ir al agua. En este artículo voy a dar algunos consejos para no tener
que depender demasiado de nadie cuando vamos al agua. Han sido tantas las veces
las que entre una regata y otra he necesitado algo que estaba en la neumática
de mi entrenador o de algún amigo y no le he encontrado que al final he
llegado a la conclusión de que en la mar hay que tratar de ser autónomo.
1º Información:
Lo primero que solemos echar de menos cuando llegamos
al campo de regatas es información; como es el recorrido, como es la corriente,
por que lado del campo “suele” darse bien cuando hay un determinado tipo de
viento, que significa esa bandera, … Hay muchos regatistas que esperan a que
vaya a empezar el procedimiento de salida para preguntarle a su entrenador este
tipo cosas y habitualmente la cosa ya no tiene remedio. Hay que ir al agua con
la lección aprendida; leerse las instrucciones de regata, informarse de cómo es
el campo de regatas, de cuando cambia la marea, de la predicción del viento,…
Debemos aprovecharnos del hecho de que a la mayoría de los regatistas estamos
encantados de demostrar todo lo que sabemos y no nos importa dar lecciones en
la barra del bar de cómo es el campo de regatas y de por donde hay que ir si
sopla este u otro viento.